Con la Técnica de estudio 3 es hora de pasar a la acción. Así como para correr una carrera, como requisito imprescindible hay que saber andar, para ponerse a estudiar, primero hay que leer.
Pasamos a analizar esta primera fase. Lo primero que se debe hacer a la hora de abordar un tema es hacer una lectura comprensiva. No piense que le va a hacer perder el tiempo, al contrario, leer un tema antes de estudiarlo le permitirá hacerse una idea general del mismo y saber de que trata, gracias a los títulos y subtítulos; al mismo tiempo se va percibiendo el nivel de conocimientos e, inconscientemente, se van relacionando los nuevos contenidos con los que ya se tienen, se dará cuenta de que no todo es tan nuevo como parecía.
Se pueden distinguir dos niveles sucesivos de profundización en la lectura: la prelectura que consiste en leer un apartado o epígrafe para formarse una idea general del contenido, viene a contestar a la pregunta ¿sobre qué trata el texto? y la lectura comprensiva en la que se intenta descubrir la estructura del epígrafe, debe hacerse párrafo a párrafo, es el momento de utilizar el diccionario cuando no se conoce el significado de algunas palabras así como manuales o apuntes; aquí ya se va diferenciando la idea principal de las ideas secundarias que la desarrollan para así establecer lazos jerárquicos de dependencia entre las ideas. Es bueno apuntar en el margen la idea o ideas generales del texto.
Para que la lectura sea más rápida y eficaz le sugerimos la siguiente práctica:
- No fijarse en las palabras aisladas, hay que hacerse con la visión de conjunto.
- La velocidad de la lectura debe ser moderada, ni muy lenta ya que se perderá la visión de conjunto, ni muy rápida porque se puede perder el «hilo» de la lectura, ir ajustando la velocidad a la dificultad del texto.
- No seguir el texto con el bolígrafo o con el dedo, también se debe evitar leer con los labios, esto resta velocidad.
- El ritmo de lectura lo marca el movimiento de los ojos, no leer moviendo la cabeza.
- Fijar la vista en la parte superior de las palabras.